lunes, 21 de septiembre de 2009

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LUNES 21 DE SEPTIEMBRE DE 2009
*HUMBERTO “TITO” VILLEGAS: CANDIDATURA CON MENSAJE

Humberto Villegas, nuestro querido “Tito” es un personaje que reclama -por que la tiene ganada-, una reseña relevante en los anales de la historia reciente de Tabasco.

Todos sabemos quien es Tito Villegas.

No es sólo un estudioso de la constitución.

No es solamente un profesionista del derecho con experiencia en el litigio y en la administración pública federal y estatal.

No es sólo el militante priísta que ha donado sus conocimientos, su talento y su experiencia al PRI, sin pedir nunca -y nunca es nunca – una recompensa, sin reclamar, por más derechos que acumuló, un pago por sus contribuciones.

Tito Villegas es eso y mucho más.

Es en toda la extensión de la palabra, un varón.

Un hombre de bien.

Un amigo generoso. Siempre dispuesto a dar. Siempre con los brazos abiertos para todo aquel que busca en un momento dado, la sombra y la frescura de una amistad reconfortante.

En ese sentido, Tito Villegas es como un árbol de fronda amigable y protectora que incita a la siesta acompasada y al reencuentro con lo mejor que puede dar el individuo: lo más genuino, permanente, cierto y congratulante de la condición humana.

Tito es una persona desprendida, ajena totalmente a las ambiciones groseras, incapaz, por naturaleza, de buscar ventaja o utilidad en la amistad o en la mera relación interpersonal.

Amigo de personajes poderosos, y esto que escribo me consta, nunca -y nunca es nunca-, se valió de esa cercanía para buscar un provecho personal.

Cuando digo “personajes poderosos” no sólo me refiero a los últimos cinco o seis gobernadores de Tabasco, sino a personajes poderosos a nivel nacional no sólo de la política, también de las finanzas y de otros ámbitos.

Nunca acudió Tito ante ninguno de ellos portando petición de ganancia personal.

Para quienes lo disfrutamos, lo admiramos y lo queremos, lo que más nos gusta de su persona es lo que podríamos llamar la parte quijotesca de su personalidad.

Tito Villegas es un gran lector de El Quijote.

Y del enorme personaje de Miguel de Cervantes Tito ha extraído una lección de vida que comparte con todos nosotros.

Pero su sabiduría no demana sólo de la lectura exhaustiva del Quijote. Pocos tabasqueños vivos han leído y asimilado a los clásicos como Tito lo ha hecho.

Y eso, su sabiduría, no es sólo fruto de sus lecturas. Tito Villegas es un hombre que ha vivido y ha sufrido.

Recuerdo en este momento una frase de uno de los capítulos más estremecedores del “Así hablaba Zaratustra” de Fiederich Nietzsche: “cuanto habrá sufrido este hombre para ser tan sabio”.

Pero en Tito no ha ganado el dolor: ha triunfado la vida.

Por eso, ahora que será diputado local, el hecho no es una recompensa de su partido, no es un reconocimiento tardío a sus enormes méritos, no: que Tito sea diputado es un regalo para nosotros, los ciudadanos, es un obsequio para la comunidad.

No es que Tito mereciera ser diputado.

Es que la ciudadanía tabasqueña ya se merecía un legislador como Humberto “Tito” Villegas Zapata.

JOSE CARLOS OCAÑA BECERRA…
No es fácil. Tener una diputación ya en la bolsa. Ser de facto diputado y ahorrarse el trabajo de hacer campaña y renunciar a ello, no es fácil.

Y José Carlos Ocaña Becerra lo ha hecho.

Al asumir el enorme reto de tomar la candidatura que la muerte de José Francisco Fuentes Esperón dejó vacante, José Carlos nos muestra varias cosas:

1.- Que tiene la humildad y el valor para rendirle un postrer homenaje al amigo y al compañero de partido al tomar la estafeta que la tragedia dejó en el aire.

2.- Que tiene los arrestos suficientes para renunciar a un puesto ya obtenido para ir a buscar el voto de la gente casa por casa y…

3.- Y que es un hombre de partido y que está decidido a ganar el titulo de político profesional y de aspirante a estadista.

No es poco lo anterior.

Tenemos en José Carlos -que será el líder de la fracción priísta en el Congreso- a alguien que lleva en sí la promesa de rendirle muy estimables servicios a Tabasco.

RÚRICO DOMINGUEZ…
A veces, la ambición no es el resorte de las conquistas personales.

A veces, es el trabajo intenso y permanente, el trabajo ante la gente y para la gente, lo que te lleva de repente a posiciones de mayor envergadura, que significan a la vez retos mayores. Es el caso de Rúrico Domínguez.

Si resulta tan buen diputado como eficiente fue en la Dirección de Protección Civil, quien ganará será la gente.

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