martes, 24 de febrero de 2009

Fax Privado

*Abuso e injusticias de la CFE en Tabasco

Aseguran quienes saben que el director de la CFE, Alfredo Elías Ayub frunce el entrecejo ante la sola mención de Tabasco.

Más aún, no hace mucho un ex alto funcionario del gobierno estatal durante el periodo de Manuel Andrade Díaz, me confió que Elías Ayub francamente detestaba a los tabasqueños.

Difícil poder comprobar estos señalamientos, pero no resulta complicado imaginar que, ciertamente, el director de la CFE tiene comprensibles motivos para no sentirse contento en Tabasco y para no tener en alta estima a los tabasqueños.

Alfredo Elías Ayub acaba de cumplir diez años como director de la CFE.

Durante ese lapso, ha colocado colocar a la CFE como una de las más eficientes empresas productoras de energía eléctrica del mundo, con amplio reconocimiento internacional.

Elías Ayub ha también alcanzado una administración sumamente exitosa, dejando atrás los tiempos del déficit atávico de la CFE y, lo más sorprendente, Elías Ayub ha logrado trabajar en completo acuerdo con el sindicato de la CFE, lo que ya de por si resulta bastante meritorio.

Por supuesto, a favor de los muchos logros de la CFE en los últimos diez años es necesario apuntar que la CFE es en los hechos un monopolio que nos vende la energía eléctrica a un precio impuesto y por encima de las empresas generadoras de energía eléctrica de los países desarrollados y de muchos con economías emergentes, como México.

Esos dos factores, que la CFE es un monopolio que impone sus precios sin competencia, por supuesto que han favorecido la no obstante destacada labor de Alfredo Elías Ayub al frente de la CFE.

En lo inédito ha sido el único director de la CFE -y de cualquier otra paraestatal en toda la historia del país-, que ha trabajado para tres presidentes distintos en el mismo puesto: para Ernesto Zedillo, Vicente Fox y Felipe Calderón.

EL ESTIGMA DE LA “RESISTENCIA CIVIL”

El prieto en el arroz de la brillante administración ayubista en la CFE es Tabasco.

Que la mitad de usuarios tabasqueños no le hayan pagado su consumo de energía a la CFE durante sus diez años de éxitos en la empresa, resulta una ostia del tamaño de una rueda de molino, que, naturalmente, Elías Ayub no va a tragarse nunca.

Para alguien que pone la productividad, los rendimientos y las utilidades por encima de toda otra consideración, pues sencillamente le resultará una especie de agravio personal y una mancilla profesional inaceptable que media comunidad no le pague el consumo de energía.

Por eso, atendiéndonos al sentido común, podemos entender que para Elías Ayub Tabasco no sea tierra estimada y los tabasqueños no le sean simpáticos.

Hasta se entiende ¿no?

A lo largo de todos estos años, ya cerca de quince, en este espacio columnistico hemos denunciado a la llamada resistencia civil como algo inaceptable, como una acción colectiva fuera de la ley y, sobre todo, como una profunda y escandalosa injusticia para quienes durante todo el tiempo que ha durado la “resistencia civil” del no pago a la CFE, hemos pagado nuestro consumo.

Reiteradamente, siempre que ha sido necesario, aquí se ha señalado que la “resistencia civil” fue una “protesta política” de Andrés Manuel López Obrador por la derrota electoral que le impuso Roberto Madrazo en las elecciones estatales de 1994.

Hemos sido, desde un primer momento y hasta ahora, opositores tenaces y denunciantes permanentes de la acción delincuencial, alentada y promovida por el lopezobradorismo en Tabasco, del no pago a la CFE.

QUE PAGUEN SANTOS POR PECADORES

Aquellos que pagamos nuestro consumo de energía, tuvimos siempre la sospecha de que la CFE nos cargaba en nuestros recibos parte de lo que no le pagaban los practicantes de las conductas delincuenciales y antisociales alentada por AMLO.

Hoy, en mi caso y en el caso de un grupo de usuarios que nos hemos reunido para protestar contra la CFE, esa sospecha se ha convertido en certeza.

La CFE nos ha aumentado nuestros recibos en hasta un ¡600 por ciento! como es mi caso y hasta en un ¡mil por ciento! en otros casos.

En casa, somos dos personas, consumimos la mitad de energía eléctrica que hace un año, y sin embargo la CFE quiere cobrarnos ¡seis veces más! respecto al importe del ultimo recibo pagado.

No conforme con ello, nos quiere cobrar consumos del 2007 y del 2008, los que hemos puntualmente pagado, como lo prueban los recibos que conservamos.

A la injusticia, se une la actitud altanera, petulante y grosera de los empleados de la CFE cuando uno acude a reclamar lo inaceptable.

¿Nos está cobrando Alfredo Elías Ayub lo que no le pagan en algunos municipios gobernados por el PRD en los que persiste la “resistencia civil lopezobradorista?

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