Miércoles 23 de Septiembre de 2009
*OCAÑA BECERRA Y LAS CAMPAÑAS DE LA CRISIS
¿Será verdad tanta belleza? Si, por supuesto que acepto que la expresión a manera de interrogante es desproporcionada respecto a la realidad a la que se refiere, pero bueno, más allá de la exageración, creo que si hay motivo para congratularnos.
Difícilmente alguien aceptará que pueda haber belleza en las campañas políticas.
Y sí: parece una imposibilidad demostrable.
Pero si no hay belleza en las campañas políticas, a fe mía si puede haberla en la nueva utilización de la palabra, en la honestidad y pulcritud que veo en el discurso de algunos políticos -algunos ¿eh?, no la mayoría, para desfortuna-, o aspirantes a políticos que están actualmente en campaña. Oigámoslos y consideremos el asunto:
1.- PLÁTICA AYER CON EL CANDIDATO A DIPUTADO del PRI por el cuarto distrito electoral, con jurisdicción en el Municipio de Centro, José Carlos Ocaña Becerra. Lo primero que llama la atención -aunque a mí en lo personal no me extraña, porque ya he platicado con él antes-, es la mesura, el cuidado, el respeto que pone José Carlos en cada palabra, en cada frase, en cada concepto del discurso que va hilvanando como candidato.
2.- ADVIERO DE ENTRADA LA AUSENCIA DE RROLLOS DEMAGÓGICOS o de las frases grandilocuentes pero huecas que todavía usan, lamentablemente, otros candidatos. Se lo hago notar a José Carlos. Me contesta que esa llaneza en el lenguaje, esa sencillez del discurso y esa claridad en la comunicación política no es exclusivamente de su autoría. Más bien es fruto de una nueva forma de hacer campaña: el dialogo con la gente. Hoy las campañas, que se realizan a ras del suelo, casa por casa y votante por votante, son más que nada diálogo. Y la gente, el pueblo, el ciudadano en lo individual rechaza el rollo, no quiere promesas incumplibles, no está dispuesto a escuchar peroratas ininteligibles, me dice José Carlos Ocaña. Y agrega: si la gente te abre la puerta, si te escucha, si acepta dialogar contigo es para referirse a los tres o cuatro problemas y/o demandas prioritarios que tenga que discutir con el candidato. Si vas a decirle que le tienes la solución para todos sus problemas para mañana y le prometes el paraíso a la vuelta de la esquina, te cierra la puerta en las narices. Es así que la gente es la que marca ahora el estilo del nuevo léxico político: se trata de un dialogo claro, muy preciso, muy especifico y muy honesto entre la gente y el candidato, asienta Ocaña Becerra.
3.- BUENO, PUES AHÍ TIENE USTED EL RESULTADO DE diversos factores que imponen una nueva modalidad en las campañas políticas. Para empezar, la nueva legislación electoral, al imponer límite de gastos y esquematizar la participación de partidos y candidatos en la radio y la televisión, ha puesto las campañas a ras de tierra, como dice José Carlos Ocaña Becerra. De tal suerte que los candidatos, al enfrentar al votante cara a cara y en el umbral de su casa, no pueden andar con rollos. Tienen que ir al grano y presentar su propuesta para atacar las tres principales demandas de la población: empleo, seguridad y desarrollo social. Vivimos las campañas de la crisis. Y como crisis quiere decir, entre otras cosas: “conjunto de estímulos nuevos e imprevistos, cambio brusco en el curso de los acontecimientos”, pues he aquí que tenemos que, de las campañas de la crisis, esta naciendo un nuevo lenguaje político, en el que privaría el respeto a la palabra, la recuperación del significado de las palabras, que ahora son la esencia del diálogo entre las partes: el candidato y el votante.
Si esto se comprueba, si el rollo unilateral, irreal, mentiroso, irresponsable y a veces insultante del discurso tradicional, ha sido condenado por las circunstancias –la crisis- a la desaparición ¡pues qué bueno! Allá de los politicastros que no se hayan dado cuenta de ello…
4.- REAFIRMO MI CREENCIA EN ESTA TESIS AL REVISAR los diálogos y mensajes de Jesús Alí, de Fernando Mayans, de Raúl Cabrera Pascasio, de Alejandro Medina, de Julián Puente e incluso de un Nelson Pérez, que aunque de una generación anterior a la de los antes mencionados, comparte con ellos una mentalidad y un lenguaje actuales.
PD: Por este medio le enviamos nuestras sinceras condolencias a Nelson Pérez García, deseando que encuentre la entereza para superar su pena enorme.
sábado, 24 de octubre de 2009
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