Martes 19 de Enero de 2010
*PATOLOGIAS Y VICIOS EN EL CONGRESO ESTATAL
“No es recomendable esperar un trabajo extraordinario de esta legislatura”, me dice uno de los diputados de mayor experiencia política, capacidad intelectual y responsabilidad ética que integran la actual diputación.
“Existen condiciones para obtener un rendimiento aceptable en cuanto al trabajo legislativo se refiere, también es posible que la Cámara de Diputados cumpla más o menos con la parte que le corresponde en su aportación a la gobernabilidad del estado, y hasta podríamos alentar cierta esperanza de recomponer en alguna medida la pésima imagen que tiene la sociedad de nosotros, los diputados, pero si de ser optimistas se trata, se vale serlo, pero de manera moderada. Te recuerdo que un optimista es un pesimista mal informado”, me dijo este diputado que, sin duda será de los que más aporten a lo largo de la actual legislatura.
1.- EN EL FUNCIONAMIENTO INTERNO DEL CONGRESO SE PADECEN DEMASIADAS INERCIAS HISTÓRICAS y se carga con viejos vicios. Si en verdad se quiere, por parte de la actual legislatura, rescatar la credibilidad perdida y ganar un poco de respeto hacia el legislativo por parte de la ciudadanía, se debe revisar muy seriamente el funcionamiento institucional de la burocracia legislativa. En este sentido, el actual presidente de la Junta de Coordinación Política, José Carlos Ocaña Becerra, podría tomar la iniciativa. Podriase empezar por revisar las funciones de la oficialía mayor, que trabaja de manera inercial y mecánica desde hace muchos años y a la que se le ceden responsabilidades que rebasan sus capacidades reales.
2.- UNA ACTITUD FACILONA DE LOS DIPUTADOS ES PEDIR QUE LA OPINIÓN PÚBLICA califique sus trabajos por en número de leyes aprobadas, o por la cantidad de iniciativas presentadas o por el cúmulo de decretos emitidos. Eso es confundir la cantidad con la calidad. Hoy en día es la cosa más fácil del mundo presentar un proyecto de ley del tema que se te antoje. Te metes a Internet, revisas las constituciones de los estados de la república o de otros países, eliges la de la materia que buscas, la imprimes, le cambias puntos y comas y le agregas dos renglones y ya tienes tu iniciativa. Algo así fue lo que hizo José Antonio de la Vega en la legislatura pasada, con el objetivo de ser el diputado con mayor número de iniciativas presentadas, objetivo que por supuesto alcanzó. Pero el verdadero trabajo de de la Vega, consistió en evitar las negociaciones, en trabar los acuerdos y en tratar de dañar la gobernabilidad en el Congreso. Labor que desarrolló con persistencia e innegable capacidad. Su otro trabajo fue el de zapador y terrorista político al servicio del PRD. O sea: lo de las iniciativas fue pura pantalla.
3.- Y ES EN ESTA VERTIENTE EN DONDE SE APRECIAN MEJOR LAS PATOLOGIAS EN LA CAMARA Y LAS BANCADAS. Cierto es que hay fracciones y diputados que entienden la responsabilidad legislativa y quieren cumplirla. Pero los otros, que tal vez son mayoría, ni entienden esa responsabilidad ni les interesa. Ellos están ahí en la persecución de botín político y beneficio personal. Nada más.
4.- EJEMPLO CONTUNDENTE DE ELO ES LA ACTUAL BANCADA DEL PRD. Para empezar, los grupos amarillos enfrentados, ya hicieron del recinto legislativo el ring de sus reyertas cotidianas. Si bien el grupo que ostenta la representación institucional del PRD en la cámara, con Juan José Martínez al frente de Julio Manzano, Jesús Selván, Fernando Gómez, Claudia Bohórquez y Cristian Aquino, ha dado muestras de voluntad participativa en los trabajos del congreso, la contraparte que representa Juan José Peralta, que es una especie de taliban trastornado que responde a las indicaciones de Javier May, Alberto Pérez Mendoza y Octavio Romero se dedicará no sólo a evitar a toda costa que el grupo de Juan José Martínez contribuya positivamente en la labor camaral, sino que intentará en cada sesión sabotear el funcionamiento de la legislatura.
Juan José Peralta es la versión chafa de José Antonio de la Vega, como veremos mañana.
martes, 19 de enero de 2010
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